Ding dong.
Suena el timbre de la oficina y como la que está sentada junto a la puerta soy yo, salgo diligente a abrir.
En el dintel, con una carterilla abrazada al pecho y una tímida sonrisa, me espera un señor de edad indefinida con claras ganas de venderme algo.
- "Buenos días, soy de la Federación Madrileña de Deportes para Sordomudos ¿están tu papá o tu mamá en casa?"
Que Santa Lucía le conserve la vista, sin duda.
11 comentarios:
Jajajajaja....sin comentarios nenita.
Besos
elena
jejejejeje Si es que estás muy joven
¿Y qué te vendría a vender desde la Federación Madrileña de Deportes para Sordomudos?...Lotería?
de aquí a nada te vuelven a pedir el carnet en los bares, fijo
Endevé la mari, si ej que la que sale bonita...
Por cierto, de nuevo estoy sin conexión. hay que joerse
Jejejeje clon.
A mí el otro día me echó el alto la segurata en un garito, al ir a entrar al baño de señoras, indicándome amablemente que "en eso no, que es solo para mujeres". Eso y que el primer día de clase me sigan tomando por alumna me hace plantearme el look Cocochaner y la media melenita como dios manda.
Pero no debemos hacerlo, porque semos spesiales
Jajajajaja!
Por favor!
Que cosas te pasan...jejejej. Tenias un lacito rosa en el pelo?
Cuidate NIÑA mia.
Se me olvido firmar el anterior post...es que con la risa tonta, no atino, no atino.
Lotería, sí, y le compré un décimo, porque después de semejante presentación...
Tan mayor y cayendo en trampas de marketing barato, tsk...
Chica, por 2 euritos de nada... además, como no tenía pelas me los prestó walter asini que...
Publicar un comentario